El plan de regularización general impulsado por la Municipalidad avanza con el objetivo de revertir el estado catastrófico en que la gestión encontró el cementerio.
Las tareas vienen siendo supervisadas por el Intendente Alak en persona. Hasta el momentó se procedió a la inhumación de 315 de los 477 ataúdes con cadáveres en su interior hallados en el cementerio local en el marco de la auditoría realizada por la Municipalidad.
“Estamos reparando una situación indigna y dolorosa mientras trabajamos para garantizar que algo así no vuelva a repetirse en nuestra ciudad”, dijo el jefe comunal durante la recorrida.
La inhumación de ataúdes es un trabajo en curso que avanza diariamente en la necrópolis el cual permite, además, darle su correspondiente uso administrativo a los siete depósitos utilizados irregularmente para el almacenamiento de los restos.
Cabe recordar que en el marco de la auditoría impulsada por la actual administración municipal se hallaron 477 ataúdes con cadáveres en su interior y más de 3 mil bolsas de residuos con restos óseos humanos, los cuales corresponden a cerca de 13 mil personas.